- Hay que ser tajantes en este sentido; durante este gobierno la política anticorrupción ha sido nula, por lo que los índices de corrupción se han incrementado al punto de estar en los mismos niveles de lo que el Perú vivió durante el gobierno fuji-montesinista, y ni que decir del primer gobierno aprista de 1985 en donde se produjeron denuncias de grueso calibre.
- ¿En caso de llegar al gobierno, cómo van enfrentar esta lacra?
- Lo que vamos a hacer es reforzar fundamentalmente dos procuradurías. Una es la que luchó contra el nefasto gobierno de Alberto Fujimori y la segunda será la creación de una nueva producaduria con procuradores que no practiquen la persecución política pero que si busquen el fondo de la verdad (Comunicore, petroaudios, chuponeo, etc.)
- Con el triunfo de Susana Villarán a la alcaldía de Lima, cree usted que ha sido un resurgimiento de la izquierda
- En primer lugar no creo que Susana Villarán sea de izquierda. A mi juicio se acomodó allí por una cuestión estratégica. Además ella siempre se ha mostrado genuflexa ante la política neoliberal que ha hecho más ricos a los ricos y más pobres a los pobres. Por eso para nosotros ella no es una fiel representante de la izquierda moderada.
- ¿Qué quiere decir con eso?
- Que la señora Villarán si bien se presenta como una izquierdista moderada en realidad es una aliada de cierto sector de los grupos de poder y de la política neoliberal que ella misma ha admitido, y que en un posible gobierno de Fuerza Social va a seguir con el continuismo de esta política que se viene dando.
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