Si usted no logra entender la Palabra de Dios, es algo muy serio peor aún si está en la iglesia y no logra comprender lo que se predica. Por eso la vida de muchos no cambia.
Esta realidad refleja la vida que usted lleva, que obviamente no concuerda con las promesas de Dios. Pero ¿por qué sucede todo esto? Es que detrás de todo eso hay un mal trabajando para destruir.
¿Cómo lo puede vencer? A través de su indignación, usted debe reprender al mal por su sobrevivencia aquí en la tierra, esta vida es solo una preparación para la vida eterna.
La vida de sacrificio que nosotros tenemos que vivir es de estar en este mundo pero no hacer lo que la mayoría hace.
Por ejemplo: estar en un mundo donde muchas personas mienten, y usted no ser un mentiroso.
Sacrificio es vivir en un mundo como este y no inclinarse a las cosas de este mundo. Si yo no sacrifico no tendré la vida eterna, porque de que le servirá tener todo en esta vida y cuando al morir usted pase a vivir un eternidad en el infierno.
No serán las personas buenas que heredaran el reino de los cielos y ni las personas malas, ¿entonces quienes serán?, aquellas personas que sacrifiquen sus vidas aquí en la tierra, aquellas que vivieron humilladas, menospreciadas, por causa de la obediencia a la palabra de Dios, todas esas personas que sacrificaron serán los que heredaran el reino de los cielos.
Lo que queremos que usted entienda es lo siguiente, que a partir del instante que usted se bautiza comienza una vida de sacrificios.
Si usa la fe inteligente tendrá una buena vida sin ninguna privación, y si no sacrifica no seré digno de heredar la vida eterna. La biblia dice: “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”. (Apocalipsis 21:4) no conseguimos ni siquiera imaginar cuan maravilloso será la vida eterna, pero esa vida significa sacrificio hasta el último día de su vida si es que pretende heredar el reino de los cielos y si no está dispuesto a sacrificar entonces puede vivir como desea, pero la única manera para que usted herede el reino de los cielos es a través del sacrifico.
El mal siempre estará a la vanguardia para desanimarlo en todo momento para así ganar su alma, pero dependerá de su decisión, si usted quiere vivir siendo atormentado eternamente, sin ninguna chance de salvación o quiere la paz total con Dios en el cielo.
Entonces tome una decisión y sacrifique a partir de ahora por su salvación eternamente.