El apetito voraz del hombre moderno por explotar los recursos de la cuenca amazónica ha hecho desvanecer a 137 especies. Según la ONG Survival, de continuar ese ritmo en 100 años la mitad de la vida en esa región habrá desaparecido.
Cada día más especies de vegetales y animales vienen desapareciendo por la acción irresponsable del hombre moderno.
Según la Rainforest Action Network, alrededor de 137 especies de vida se desvanecen cada día a causa de la destrucción de las selvas tropicales. En Brasil, especies como el águila arpía, el tití león con cara negra y el jaguar están a punto de desaparecer.
Pero no solo los animales y las plantas están siendo afectados por la destrucción de su habitat natural, sino también, por paradójico que parezca, el hombre.
Por ejemplo, en el Perú por el uso del mercurio en la minería informal del departamento de Madre de Dios, varias comunidades indígenas vienen siendo afectadas.
Recientemente el Instituto de Ciencia de Carnegie de los Estados Unidos detalló que encontró niveles de mercurio por encima de los límites aceptables para la vida de las personas en ese departamento. De acuerdo con el director del proyecto, Luís E. Fernández, los niños de las comunidades indígenas de Madre de Dios tenían hasta tres veces más mercurio en el cuerpo. Eso como es obvio, dijo, causa daños irreversibles al sistema nervioso central, provoca síntomas como temblores, pérdida de la memoria, dificultad motora, de visión y audición, etc.
Según la antropóloga Margaret Benavides, la degradación de la floresta para su uso sin una gestión adecuada, la contaminación del agua por derrames de petróleo y minerales, la deforestación para actividades agrícolas, la proliferación de incendios, y las mudanzas climáticas vienen originando problemas en la vida de los indígenas y de la populación ribereña.
En Brasil por culpa de este problema están desapareciendo las pocas tribus indígenas que quedan. Una de ellas son los Awá, que según la ONG Survival están a punto de desaparecer debido a que no tienen que comer ya que los animales que ellos cazan han migrado producto de la deforestación.
La contaminación y la alteración físico químico, como en el caso del mercurio para la extracción de oro en el Perú, no solo provoca desequilibrios en el ecosistema sino también la destrucción de la vida misma.
Según Survival, si continuamos con ese ritmo, en 100 años la mitad de las especies que hoy conocemos habrá desaparecido.
Para Augusto Bernardo Cecílio, auditor fiscal y coordinador del Programa de Educación Fiscal en la Amazonía, debemos ser protectores de la naturaleza y no víctimas, saber utilizarla porque los recursos del planeta son finitos, es decir, algún día se van a acabar. (Patricia Rosa: periodista especializada en Gestión Ambiental/Brasil).
Un grand informe, valioso.
ResponderEliminar