El ex ministro de Educación durante el gobierno de Alejandro Toledo, Nicolás Lynch, afirma que las carreras que ofrecen muchas universidades e institutos no son los que el mercado laboral requiere. Considera que debe haber menos centros de educación superior ya que muchas responden a intereses particulares
- Doctor, por un lado se habla de que no hay trabajo en el país pero sin embargo de acuerdo con un estudio de Sencico las empresas están requiriendo por lo menos 80 mil técnicos al año. ¿A su juicio a qué se debe esta situación?
- En el Perú existen técnicos. Con sólo mirar, por ejemplo, el centro de Lima podremos ver una cantidad impresionante de institutos. Para mí, el meollo del asunto pasa por la falta de una pertinencia en la educación técnica en general en el país
- ¿Qué quiere decir con ello?
- A que la educación técnica existente no está de acorde con el mercado laboral y las necesidades del país. Estamos formando profesionales para ser taxistas, comerciantes, cuando ese no es el objetivo
- ¿Entonces dónde estaría radicando el problema?
- Que los institutos que hay muchos en el país no están cubriendo las vacantes que el mercado requiere; en otras palabras, lo que está pasando es que las carreras que se están ofreciendo no están satisfaciendo la demanda.
- O sea qué…
- Si nos guiamos por la cantidad de universidades e institutos en el país nos vamos a llevar una gran decepción.
- Explíquese a qué se refiere
- La enseñanza que ofrecen la mayor parte de institutos y universidades del país no es mala es pésima, que es muy distinta a ser malas.
- ¿Malas en qué sentido?
- Esa es una pregunta que se tiene que hacer al Ministerio de Educación, en que se está fallando y a dónde se quiere llegar si se sigue por este camino.
- ¿Me da a entender que el ministerio no tiene las cosas muy claras de lo que se quiere hacer?
- Si uno va manejando por la carretera sin ningún rumbo definido, nunca va a llegar a su destino. Si el ministerio no regula la currícula de estos centros de estudios para mejorar la calidad de educación que están brindando nunca tendremos buenos estudiantes. Tengo una teoría, necesitamos a gritos menos universidades e institutos, pero de mejor calidad. Además de enfocarlas y adecuarlas al mercado y a las necesidades laborales.
- Se ha hecho un estudio de qué carrera son los que tienen más demanda
- No solo se ha hecho un estudio, sino varios y a un nivel sofisticadísimo; se sabe perfectamente lo que se necesita pero no se hace porque existen intereses creados por grandes y pequeños inversionistas que hay en el aparato estatal.
- Entonces hay intereses de terceros?
- Un claro ejemplo se puede dar en el tema de las universidades, en donde se siguen dando licencias de funcionamiento a diestra y siniestra sin que nada se haga al respecto. Y lo que es peor, ni siquiera se dan el trabajo de revisar cual va a ser su destino de aquí a un futuro ni mucho menos si las carreras que ofrecen están acorde con el mercado y cual va a ser el nicho que van a cubrir.
- ¿Y de dónde vienen estos intereses?
- Muchas de estas iniciativas provienen del propio Congreso de la República. Es que ahora que se acercan las elecciones presidenciales y congresales el interés crece, es por ello que les urgen los votos preferenciales en esas mismas provincias en donde inauguran entre bombos y platillos dichas universidades. Recientemente se han creado universidades absurdas en Cañete, Barranca, Jaén y Sullana sin ningún estudio previo.
- ¿Es por esa razón que muchos congresistas se van a provincias a ser elegidos?
- Así es. A estas personas no les interesa si es pertinente esa institución, si las carreras que vayan ofrecer es la más adecuada. En otras palabras, se han creado universidades absurdas en lugares antes mencionados, donde algunos ni siquiera tienen profesores que vayan a enseñar en esa zona, pero lo mas grave es que se están malgastando el dinero de todos los peruanos en proyectos absurdos.
- Existen muchos institutos que se han vuelto universidades eso es legal
- No se puede hacer eso en el Perú, eso es ilegal por una sencilla razón, el objeto de las universidades es muy distinto a las de un instituto.
- ¿Qué piensa de la Universidad Alas Peruanas que tiene filiales por todo el país?
- Hay un problema serio en este sentido. Si bien existe el Decreto Legislativo 882 que prohíbe claramente a las universidades tener sucursales fuera del departamento de su creación, sin embargo casi nadie lo cumple.
- ¿Entonces vivimos en el país donde todos hacen lo que quieren?
- Si nos ponemos a analizar fríamente como se dan las cosas podemos afirmar que existen tres fuentes de negocio inagotable: 1.- El negocio de los comerciantes de la educación (lucran sin interesarle el nivel ni mucho menos del servicio que están brindando). 2.- La seguridad y; 3.- El trabajo de ser congresistas (de ser elegidos tienen 5 años para poder arquear sus cuentas y así asegurar su futuro).
- ¿Cuándo piensa usted que se va a acabar esto?
- Cuando halla en el país un gobierno interesado por el Perú. Los gobiernos que tenemos son gobiernos coloniales a los cuales el futuro del país no les interesa, lo único que les importa es ganar plata y que sus amos extranjeros estén contentos.
- ¿Se avizora algún cambio ahora que se acercan las elecciones presidenciales?
- Ojala sea, pero no veo a ninguno
DATOS
1.- En el 2008, la congresista aprista, Mercedes Cabanillas, presentó un proyecto de ley que de haber sido aprobada suspendería la creación de nuevas universidades en todo el país, cosa que por supuesto no fue aceptada. Según la legisladora, la mala enseñanza que se brinda en determinados centros de educación superior termina por perjudicar a los alumnos en la medida que su deficiente formación les impide competir con profesionales egresados de universidades que sí tienen un reconocido prestigio académico.
2.- Según el último censo del 2007, tenemos en el Perú alrededor de 92 universidades, de las cuales 56 son privadas, a eso le sumamos 34 filiales en provincias autorizadas y más de 500 sucursales clandestinas.
3.- El profesor Nicolás Lynch tiene un doctorado en Sociología en el New School For Social Research de Nueva York. Actualmente es docente de una maestría en Ciencias Políticas en la Pontificia Universidad Católica del Perú
Escribe: Cristhian Briceño R
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