El problema de los zapatos altos

Sinónimo de elegancia y seducción, los zapatos altos elevan la estatura, por lo que son usados con frecuencia. Sin embargo, sabía usted que su uso diario genera problemas de salud. En “El Universal” te recomendamos algunos puntos importantes que debes tener en cuenta antes de comprarte un zapato, en especial si te gustan los de tacón.

Las mujeres disfrutan comprando zapatos. Pueden tener docenas en los armarios y siempre quieren más. Mientras más altos, angostos y puntiagudos mejor. La comodidad y la salud de los pies pasan a un segundo plano cuando se trata de estar a la moda y verse hermosa y atractiva. Pero piénsalo así: los pies soportan el peso de todo el cuerpo y al mismo tiempo te brindan un gran beneficio porque transportan de un lugar a otro. Sin embargo, los pies son quizás una de las partes del cuerpo que menos cuidados reciben. Por eso, es importante aprender a elegir el calzado adecuado y evitarte problemas de salud.

El cuerpo padece

Los zapatos altos y apretados contribuyen en gran parte a la aparición de las callosidades en los dedos y las plantas del pie, así como los juanetes, que no solo no son glamorosos, ya que causan por lo general causan dolor. Éstos son algunos de los resultados del uso de los tacones, pero pocas mujeres saben que el uso de tacones altos puede contribuir al desgaste del cartílago que existe en las articulaciones. Al acabarse este cartílago, los huesos rozan unos con otros generando desgate de los mismos. Esta enfermedad es conocida como osteoartritis.

Si tienes sobrepeso debes tener aún más cuidado con tus pies. Una cosa es permanecer sentada con tacones y otra muy distinta, es caminar con ellos. Al caminar, tus pies soportan casi cuatro veces el peso de tu cuerpo. 

Cuando estás en posición vertical, el talón es la parte del pie diseñada para soportar el peso de tu cuerpo. Cuando utilizas los zapatos altos, el peso de tu cuerpo recae en la parte delantera de la planta del pie y sobre los dedos. Esto produce que ellos se deformen con el tiempo debido al peso que tienen que soportar.

Si eres diabética también debes tener mucho cuidado con el calzado que eliges. Los zapatos puntiagudos pueden causar presión en tus dedos, mientras que los zapatos altos no permiten que el pie encuentre una postura cómoda para descansar.

Otras complicaciones

Pero los zapatos no solo afectan a tus pies, sino a otras partes de tu cuerpo como a las rodillas y a la espalda. Algunos especialistas consideran que el usar tacones altos es un verdadero atentado contra la salud de las rodillas porque genera desgaste en esos cartílagos. Por eso, antes de subirte en tus tacones altos, recuerda que la rodilla es una articulación muy compleja que cuando se ve afectada requiere de tiempo y esfuerzo para su recuperación.

La espalda tampoco se escapa del efecto dañino de los zapatos de tacón. ¿Por qué? Al usar zapatos altos e incómodos, adoptas ciertos tipos de posturas tratando de aliviar el malestar y el dolor de tus pies. Muchas de estas posturas afectan tu espalda. 

Para la presidenta del Colegio Profesional de Podólogos del Perú, Lupe Vargas, los zapatos deben tener como máximo 2cm  ya que a más altura el talón estará en constante contacto con el suelo y esto produciría lo que conocemos como “espolón calcáneo”, eso quiere decir que tendría una calcificación (depósito de calcio exagerado) en ese hueso que, cuando se complica con inflamación de los tejidos blandos, causa dolor.

Según Vargas, las niñas no deben usar zapatos de taco alto porque sus pies aún no están formados del todo, por lo que se recomienda que recién la usen a partir de los 15 o 18 años, ya que de lo contrario van a sufrir de “juanetes”. 

“Las personas embarazadas al igual que las gorditas y las de la tercera edad tampoco pueden usar zapatos de taco alto ya que su estabilidad no es la óptima, una caída podría ser fatal ya que traería complicaciones a su bebe si está embarazada o rotura de huesos si es gordita o anciana”, refiere la especialista.

Pero hay más. Una reciente investigación de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sao Paulo, señala que el uso constante de tacos altos origina varices y otras dolencias venosas, como flebitis (inflamación de una vena de la pierna) y hasta trombosis.