jueves, 28 de junio de 2012

“Hay que orientar a los adolescentes”


Mayda Ramos Ballón, Defensora Adjunta para la Niñez y la Adolescencia de la Defensoría del Pueblo, también habla sobre el polémico proyecto.


“Desde el 2007 nosotros hemos tenido esta posición. Ese año enviamos al Congreso de la República nuestra opinión mediante un oficio, en la que señalamos las razones por las que se debía despenalizar las relaciones entre adolescentes. Y ante esta iniciativa actual, también mantenemos la misma dirección. De acuerdo a nuestra propuesta, se permitirían las relaciones sexuales entre adolescentes de 14 a 18 años. Sin embargo, hay casos específicos en los que se han hecho contemplaciones para la norma, como es el caso de engaño, es decir, si el muchacho, usando mentiras, logra que la chica consienta la relación sexual, y luego es descubierto, será sancionado; también se contempla el abuso de poder por parte de los profesores y autoridades; y la vulnerabilidad en la víctima, esto es, si una muchacha, por cualquier razón (familias disfuncionales, abusos, maltratos, traumas, etc.) , muestra signos de vulnerabilidad en su estado emocional y viene un joven y, aprovechándose de esa situación, logra tener relaciones sexuales con ella, también estaría cometiendo delito. Para lograr esto habrá una investigación penal, porque no solo bastará la palabra de la chica. También se usarán exámenes sicológicos para corroborar la vulnerabilidad y el estado emocional de la víctima”, señala Mayda Ramos. 
Sin embargo la funcionaria de la Defensoría, aclara que el hecho que su institución este de acuerdo con este proyecto no significa que estén promoviendo el libertinaje entre los adolescentes. Lo que nosotros creemos, dice, es que mientras más información tenga la persona sobre este asunto, más tardará en iniciar su vida sexual, porque cuando la adolescente sepa que, si sale embarazada, deberá tener que hacer doble esfuerzo para terminar su educación y cuidar a su hijo, entonces, lo va a pensar dos veces. Mientras que el muchacho deberá tener presente que, si su pareja sale en estado de embarazo, él tendrá que trabajar y probablemente dejar el colegio. “Esto hará que ellos piensen mejor antes de hacer las cosas. Además, creemos que si el adolescente decide iniciar su vida sexual, debe hacerlo en buenas condiciones, con información detallada y usando métodos anticonceptivos para evitar los embarazos no deseados y las enfermedades de transmisión sexual”, afirma la especialista.
De acuerdo con Ramos Ballón, penalizar a los adolescentes porque tienen sexo, es desconocer una realidad que está mostrada en cifras: cada vez las mujeres y hombres empiezan su vida sexual a más temprana edad.
Según la ENDES del 2011 (Encuesta Nacional Demográfica y de Salud Familiar), trece de cada cien mujeres ya ha tenido hijos y está embarazada por primera vez. “Entonces, el 13% de adolescentes mujeres en el Perú ya ha iniciado sus relaciones sexuales. Por lo tanto, qué ganamos penalizando a dichas personas. Es más, con la penalización de las relaciones sexuales entre adolescentes no se ha disminuido el índice de embarazo en menores de edad ni los índices de violación. Lo único que hemos conseguido es disuadir a los adolescentes a recurrir a los centros de salud para sus controles pre y post natales, poniendo en riesgo su salud y el de la futura criatura”, dice Mayda Ramos.
Sin embargo, este no es el único problema. A decir, de la funcionaria de la Defensoría, los adolescentes por temor hacer denunciados cuando nace el bebé no las llevan a los Registros Civiles. “Debemos entender que el sexo entre adolescentes existe y no podemos negarlo. Ahora, si me preguntaran si yo quiero que mi hijo adolescente inicie su vida sexual a tan prematura edad, pues, yo les diría que no, porque obviamente no quiero que eso suceda. Pero si sucede, entonces, quisiera ser yo quien le dé información, métodos y orientación, que sería mucho mejor que lo haga sin control y sin cuidado. No debemos seguir pensando que el sexo es un tema tabú, un tema escondido, porque nuestra realidad nos muestra lo contrario”, sostiene Ramos.
Ante la hipótesis de que esta polémica ley incrementará los índices de familias disfuncionales en el país, debido a la inmadurez de los adolescentes que decidan unirse a sus parejas e iniciar sus vidas sexuales, Mayda Ramos indica que el hecho de que dos personas mayores se junten, no garantiza una familia estable o funcional, y para esto nos invitó a revisar los índices de violencia familiar en el país. “La edad no es un determinante para familias disfuncionales o violentas. Eso depende de la educación de las personas o del machismo, porque hay casos de feminicidio que no tiene que ver con la edad, si no con la formación”, dice.
También se le cuestionó sobre la inmadurez física y emocional del adolescente al momento de iniciar su vida sexual, a lo que la defensora indicó que “si bien es cierto, a esa edad el adolescente es física y emocionalmente inmaduro, la solución no es mandarlo a la cárcel, sino establecer programas de educación y orientación sexual disponible para ellos, porque lo que señala el Plan Nacional de Acción por la Infancia es que el promedio de iniciación de vida sexual en una persona en el Perú es a los 12 años. Entonces, tenemos que trabajar para que esto no quede así”, afirma la funcionaria.

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