“Hoy somos felices”

Terapia del Amor

Graciela Enrique solo pensaba en la disolución de su matrimonio como la única solución a tantos problemas que atravesaba, principalmente a los de origen espiritual. Las continuas peleas con su esposo afectaban la convivencia con sus hijas y la familia se desmoronaba un poco más cada día. “No valoraba a mi familia, los maltrataba física y verbalmente, sentía que una fuerza extraña me dominaba haciendo que mi carácter fuera irreconocible. Con mi esposo las discusiones llegaron a ser tan fuertes que nos golpeábamos, incluso nos lastimábamos. Estaba muy angustiada, no comprendía por qué si nos amábamos, mi familia estaba viviendo ese infierno. Quería ser feliz con mi esposo pero sentía un profundo rechazo que me impedía ser amable con él y demostrarle cuanto lo quería. Teníamos una relación muy fría, no había diálogo entre nosotros y solo pensábamos en la separación”, cuenta.

A través del programa de televisión de la Comunidad Cristiana del Espíritu Santo comprendieron que había una solución para su familia, entonces decidieron participar de las reuniones. Perseveraron usando la fe y Dios fue obrando en sus vidas. Su familia fue totalmente reconstruida. “Hoy somos felices, hay unión, paz, diálogo y una alegría que perdura por sobre todo”, afirma Graciela. Esta familia que antes era víctima del dolor y del sufrimiento hoy disfruta del amor y la paz que solo el Señor Jesús puede brindar.