El vóley peruano y sus debilidades

Si muchos creían que en el futbol solo habían actos de indisciplina. Pues se equivocan, el vóley también tiene esos problemas, claro que en menor proporción porque quizás no son muy escandalosos como de los futbolistas pero al fin y al cabo es indisciplina y como tal deben castigarse

El vóley peruano es catalogado como el deporte que más alegrías ha dado al país, ya que recordamos épocas memorables donde se cosecho varias victorias, pero que desafortunadamente quedaron en el olvido por múltiples factores.

A falta de goles, sobran los mates

En los años 80 mientras, el Perú sufría una crisis interna, pero había un deporte que a muchos nos alegraba, el vóley, es por eso que gracias a la experiencia de tener un técnico oriental como Akira Kato (murió de cáncer en Lima) se decide contratar al surcoreano Man Bok Park quien ya habían trabajado juntos en la década de los sesenta, los resultados no se hicieron esperar ya que fuimos subcampeón mundial juvenil en México en el año 1981, luego en el mundial de Checoslovaquia en donde se obtuvo la medalla de bronce tras derrotar en primera rueda a la República Federal Alemana por 3-0, a Brasil por 3-1 y caer ante Cuba en dramático partido por 2-3. Luego, en segunda ronda, derrotó por 3-1 a la misma Checoslovaquia, 3-0 a Bulgaria y 3-0 a Corea del Sur. Llegó a las semifinales, y cayó ante la poderosa China por 3-0 y tuvo que conformarse con pelear por el tercer lugar. En ese partido, derrotó al poderoso equipo de la República Democrática Alemana por 3-1, demostrando un gran progreso del equipo, con miras a las Olimpiadas de Seúl.

Pero su momento cumbre fue en los juegos olímpicos de Seúl 88 donde Perú quedo entre los mejores del mundo recibiendo el reconocimiento del Estado y de la población.

Pero los tiempos han cambiado, ahora regresar a la senda del triunfo le esta costando mucho.

A las chicas le falta potencia física

Mucho de los factores el porque el vóley se ha estancado es porque la indisciplina invadió a este deporte, pero otro factor es el biótico, muchas de las chicas no tienen la talla como para jugar en la elite del vóley, eso fue visto el ultimo fin de semana donde las peruanas fueron dominadas tanto en lo psicológico como en lo físico por las cubanas.

Pero para acabar con este problema, la Federación de Vóley contrato al brasileño, Otavio Machado, quien desde enero se encarga de la parte física de las chicas, nos cuenta que el nivel de las jugadoras peruanas es bajo, por eso es necesario fortalecer la parte física para poder luchar palmo a palmo con las grandes potencias. “Las chicas necesitan mas coordinación, flexibilidad, estiramiento, y aumento de la masa muscular ya que así no podrán competir con otras jugadoras, en ese aspecto nos llevan un poco de ventaja pero creo que con un trabajo bien planificado podremos alcanzar nuestra meta” finalizó.

Cuando le preguntamos que le pareció el nivel de las jugadoras en el campeonato internacional realizado en el Manuel Bonilla, señaló que estuvo aceptable desde su juicio pero espera mucho más. “El rendimiento de las chicas estuvo muy bien, ya que me comentaron que el año pasado cuando terminaron de jugar en el Cusco estaban muertas, ahora no, las veo físicamente bien”.

“El trabajo de Cuba es muy fuerte, pero no solo eso, su biotipo es espectacular ya que normalmente esas chicas miden 2 metros como mínimo, pero eso no quiere decir que nos vamos a amilanar, por el contrario nos da mas fuerzas para luchar”.

Para el brasileño, el trabajo de Natalia Málaga es muy importante para poder tener resultados, “es necesario ser fuerte con las chicas ya que este deporte lo amerita, sino tienes un carácter fuerte no podrás sobresalir y serás una mediocre y eso es lo que Natalia no quiere” finalizó Otavio Machado.

Casos de indisciplina en el vóley

Pero desafortunadamente no solo la parte física esta fallando, la parte psicológica ya les esta pasando factura, muchos piensan que a estas jovencitas ya se les subió la fama a la cabeza por las actitudes que toman, para el periodista, Jaime Guerrero, el caso es el siguiente. “Presiento que a las jovencitas se les ha subido un poco la fama a la cabeza, espero que me equivoque porque la verdad seria bien triste que terminen como los jugadores de futbol que lo único que buscan es comprarse cosas que no tienen valor.”

“Creo que seria importante la ayuda de un psicólogo ya que muchas de estas chicas no tienen la edad suficiente para poder manejar la fama, además no tiene nada de malo tener un psicólogo ya que Cuba y Brasil siendo potencias en el vóley lo tienen, porque en el Perú no.” acotó.

Pero la indisciplina también esta presente en el vóley, el último caso fue el de María de Fátima Acosta, quien dejó a la selección cuando disputaban un partido importante, ante eso, la seleccionadora Natalia Málaga decidió sacarla del equipo ya que consideró como un acto de indisciplina. “Lo que ha hecho es una falta de respeto no solo a sus compañeras sino a todo el Perú, me molesta la mentira y la irresponsabilidad. Ella tenía un compromiso con la selección que se está preparando para el Mundial”, indicó.

Ante este hecho, el Presidente de la Federación de Vóley, Juan Castro, refirió que existe un informe firmado por todos los miembros directivos del equipo.

“Sobre María Acosta hay una determinación del comando técnico y un informe firmado por todos los integrantes con argumentos válidos, en este momento ella esta fuera del mundial. Estamos convencidos que con estas medidas evitaremos casos similares”, sentenció.

Otro caso de indisciplina fue protagonizada por Mirtha Uribe, quien entre lagrimas manifestó que fue injusta su separación. “La verdad no entiendo porque me sacaron de la selección si estaba jugando en una liga competitiva, tenía buenos partidos, quedé en buena posición”, dijo la deportista.

Para Natalia Málaga, esos son pretextos, pues el verdadero factor fue no quiso jugar los últimos minutos de un partido, aduciendo que ella no es ninguna principiante. “Me ha dado mucha bronca lo que ha dicho, que venga y que tenga el coraje de decírmelo en mi cara”, aseguró Natalia Málaga.

Otro caso de indisciplina es el de Zenaida Uribe, ella fue separada de la selección nacional, luego de que dejó esperando al equipo peruano en la Copa Mundo de 1991, mientras ella permanecía en Italia el equipo peruano perdía su clasificación a las Olimpiadas de Barcelona 1992.

En 1993 se voceaba su retorno, pero las chicas de la selección de mayores declararon que nadie la quería en el equipo, todas ellas se sentían traicionadas. Pasaron los años y su castigo fue levantado y en 1998 ella integraba la preselección nacional de mayores nuevamente.

Veinte años después, la actual congresista respalda la actitud de la entrenadora Natalia Málaga ante la expulsión de María Fátima Acosta.