jueves, 9 de enero de 2014

“Uno no debe caer nunca en la vanidad”

El exfutbolista y ahora actor, Francisco Paco Bazán, que interpretó a Augusto Polo Campos en “Los Amores de Polo”, nos cuenta acerca de su nueva faceta. Actualmente comparte roles con Marisol Aguirre en la obra “Una chica en mi closet”, en el teatro Marsano.  

-¿Cuándo te nace esa inclinación por lo artístico?
-Es una pregunta complicada. Desde chico siempre tuve esas ganas por comunicar, interpretar, de ahí que paralelo al fútbol, deporte que amo mucho, estudie actuación.
 -Muchas personas consideran la actuación como un simple pasatiempo, ¿tú cómo lo ves?
-Como una carrera profesional, porque demanda sacrificio, esfuerzo y un trabajo a consciencia porque crear un personaje requiere de una formación profesional e intelectual. 
-¿Te sientes cómodo en tu nueva etapa como actor?
-Estoy agradecido con la vida por haber podido hacer cosas que me han apasionado como lo fue el fútbol, haber salido campeón y ahora actuar. Me siento bastante cómodo, satisfecho y pleno de haber cumplido ese gusto que siempre tuve presente. 
-¿Te consideras un “símbolo sexual” masculino?
-No lo sé, yo simplemente hago mi trabajo, trato de estar bien físicamente porque también mi trabajo me lo demanda y porque también es saludable. Uno nunca debe caer en la vanidad, dejo que la gente sea la que decida y diga lo que mi trabajo le inspira, pero por mi parte no puedo decir nada porque no creo en los rótulos. 
-¿Los personajes que interpretas, tienen algo de tu personalidad?
-Soy bastante distinto en teatro como en televisión. Leí que todo personaje tiene algo del actor quien le da vida. En mi caso, cuando interpreté a Augusto Polo Campos sentía que al interpretarlo, tenía en común conmigo lo alegre en lo social, pícaro, pero en otros aspectos, le prestaba mi energía porque tenía cualidades contrarias a las mías.
-Has interpretado papeles de galán junto a mujeres talentosas. ¿Qué opinas de la violencia hacia ellas?
-Estoy en contra de todo tipo de violencia, no entiendo cómo puede haber personas que incurren en eso. Siempre trato de hablar o reservarme cosas para no herir susceptibilidades, pero vivimos en una sociedad violenta donde todos agreden, aun hasta para conducir. 
-¿Has pensado volver a estar vinculado al fútbol en un futuro como entrenador o directivo?
-Soy un apasionado al fútbol, lo consumo y estoy constantemente conectado, pero lo veo complicado porque no he estudiado pedagogía deportiva ni soy profesional en ese campo. Tal vez en un área de comunicación deportiva, no lo descartaría, pero por ahora me siento cómodo en la actuación y así quiero seguir.
-¿Qué crees que le está faltando a nuestro fútbol para que pueda surgir?
-Este problema tiene su origen en lo social. Los chicos que están saliendo vienen de un núcleo familiar, una idiosincrasia diferente. Tienen que aprender a profesionalizar su mente, porque esa es una carrera seria y con mucho sacrificio. Lamentablemente nuestro fútbol “profesional” tiene espíritu amateur y eso se revierte con educación básica e inversión para profesionalizar la industria deportiva. (Javier Peña)

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