Un hecho más que preocupante. Myrko Olórtegui, presidente de la Federación de Trabajadores de la Aviación Civil del Perú (FETRACIP), señala que la seguridad de los pasajeros y del personal de los aviones corre un mayor peligro por la inoperatividad de los ocho radares que se compraron durante el gobierno aprista.
- Actualmente, ¿cuál es la realidad de la aviación civil?
- Es una actividad que está en constante desarrollo dentro de los parámetros de seguridad, eficiencia, pero que no vamos a negar aún tiene algunos tipos de conflicto. Por eso creemos que este es el momento oportuno de acompañar el crecimiento del país con una adecuada comunicación entre los trabajadores y las empresas que se traduzcan en un mejor servicio al público usuario.
- Cuando el gobierno aprista desalojó el aeródromo de Collique para entregarlo a la voracidad de empresas constructoras, se dijo que se había dado un golpe de muerte a la aviación civil. En su calidad de presidente de la FETRACIP, ¿qué opinión tiene al respecto?
- Recordemos que el terreno del aeródromo nació producto de una colecta nacional que se hizo en el año 48 para desarrollar el uso de la Escuela de Aviación Civil. Desde el punto de vista legal un bien que fue donado para un objetivo específico no puede ser usado para otro fin. El 70 por ciento de pilotos que tenemos en el sindicato provienen de esta escuela por lo tanto es una preocupación para nosotros el destino que se le dé a este aeródromo. Esperamos que el actual gobierno se manifieste al respecto.
- ¿La desaparición de la Escuela de Aviación Civil del Estado conllevará a qué muchos jóvenes de escasos recursos no puedan seguir la carrera de pilotos?
- Tomando en cuenta lo caro que cobran las cuatro escuelas de aviación civil privadas que hay en el país, es necesario mantener la de Collique. De lo contrario vamos a elitizar esta carrera, y eso a nuestro criterio no es justo.
- Sobre la ampliación del Aeropuerto Jorge Chávez hay gente entendida en la materia que señala que los trabajos debieron hacerse antes. ¿Usted qué piensa?
- Es verdad, debió haberse empezado hace años. Pero bueno, mientras tanto no nos queda más que ser imaginativos. Por lo pronto, sabemos que Lima Airport Partners está trabajando en la ampliación de zonas de estacionamiento para los aviones, implementando un sistema de navegación y aterrizaje que permitan tener un tránsito más fluido de aviones. Sin embargo esas medidas son insuficientes.
- Cuando el gobierno promulgó la ley creando el Aeropuerto Internacional de Chincheros hubieron personas que dijeron que el lugar escogido no era idóneo. Como piloto de una empresa aérea, ¿qué podría decirme al respecto?
- Hasta el momento no tenemos el estudio técnico que sabemos estuvo a cargo de una empresa española para decirle si el lugar es idóneo o no.
- Tomando en cuenta que la construcción del Aeropuerto de Chincheros va tomar tiempo, ¿qué medidas podemos tomar con respecto a la del Cusco?
- Lo que podemos hacer es ampliar por dos horas las operaciones nocturnas ya que hay aviones que gracias a la tecnología pueden aterrizar de noche. Es cuestión que el Gobierno Regional del Cusco autorice.
- Señor Olórtegui, cuando Humala llegó al gobierno habló de la creación de una empresa aérea de bandera aduciendo que era necesario romper con el monopolio de una compañía privada. ¿Usted como piloto cree que sea necesario contar con una empresa nacional?
- Hablar de un monopolio es faltar a la verdad. Ya que de acuerdo con la APEA el principal operador en el país está con el 60% de participación. El resto es cubierto por las demás compañias. Con respecto a la empresa de bandera, personalmente considero que es necesario ya que hay lugares que a pesar de tener un aeropuerto no cuentan con un servicio aéreo y eso es lamentable más aún cuando tenemos muchos compatriotas que requieren trasladarse de un lugar a otro ya sea por razones de salud o de trabajo.
- ¿La creación de la Federación de Trabajadores de la Aviación Civil, cuya presidencia ha recaído en su persona, responde a una cuestión de mejoras salariales?
- No es una reacción a un tema de conflicto, la cosa no pasa por ahí. La Federación que hoy está integrada por ocho sindicatos lo que busca es tener un servicio seguro y eficiente para los pasajeros y las empresas. Y para ello necesitamos tener una adecuada línea de comunicación entre los trabajadores y los dueños.
- ¿Cuando usted habla de tener un servicio seguro para los pasajeros se está refiriendo a algo en específico?
- Básicamente al tema de los radares que se han instalado en varios aeropuertos del país pero que no están funcionando. Y eso para nosotros es un hecho preocupante puesto que está poniendo en peligro la seguridad de los pasajeros y del mismo personal que labora en los aviones.
La aseveración de Myrko Olórtegui, quien también es secretario general del Sindicato de Pilotos de Lan Perú, es confirmada por el técnico de Corpac Víctor Díaz.
El técnico cuenta que ante la inoperatividad de esos radares ellos continúan trabajando con los equipos antiguos que no siempre son seguros, de ahí que demande a Corpac se pronuncie al respecto y que no espere que suceda alguna tragedia para recién decir algo.
La historia de esta compra data del 2009. Ese año durante el gobierno aprista se adquirió de la compañía española INDRA ocho radares por un monto de $34,094, 128. Y de la empresa francesa INEO un sistema de comunicación satelital VSAT por un costo de $3,930, 058. Haciendo un total de $ 38,024,186.
En enero del 2010 el presidente García y el ministro de Transporte Enrique Cornejo informaron a la prensa que un plazo de 24 meses (dos años) esos radares iban estar instalados y funcionando en Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Iquitos, Pucallpa, Talara y Lima. Algo que a decir de Olórtegui y Díaz, ha sucedido pero a medias, es decir están instalados más ninguno de ellos está operativo.
Actualmente la única ciudad del Perú que cuenta con un radar, aunque sea viejo, es Lima. (RVC)
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