Vida de dos
“¿Quién llegó primero al Centro de Ayuda fue mi esposo. Nuestra vida sentimental estaba destruida por completo. Llegó en un momento en que nos dimos cuenta de que no había nada más que hacer. El matrimonio parecía terminado”, confesó Sonia
Sonia vivía una vida de apariencias. Su matrimonio parecía haber acabado. Ella siempre ha querido a su esposo, pero habían muchas peleas entre ellos. “La situación era muy difícil entre nosotros”, dijo Sonia.
Sonia reveló que su esposo y ella no conseguían lograr un matrimonio feliz. Ellos no compartían más la misma habitación y cada uno salía a la calle solo. “Fuimos una pareja desequilibrada. Hasta que mi esposo fue invitado a participar de la Terapia del Amor”, afirmó. Su esposo Lula, se dio cuenta de la gravedad del problema que tenía en la primera oportunidad que estuvo en el Cenáculo del Espíritu Santo. “Cuando llegué en la iglesia sentí algo muy fuerte. Mi problema era muy serio y espiritual. ¡Estaba en peligro! E incluso físicamente yo golpeaba a mi esposa. Pero el día que llegué aquí, después de la reunión, le dije al pastor todo que pasaba, él hizo una oración con la imposición de manos en mi cabeza, mis piernas empezaron a temblar y sentía picazón en todo el cuerpo por una semana. Así fue el proceso de mi liberación”, reveló.
En ese momento, ellos comenzaron a dar prioridad a su liberación y a su encuentro con Dios. “Estamos en Cenáculo hace tres meses y esta vez no se compara con los diez años que he estado en otra iglesia. Me concentré mucho en mi liberación, pero no fue fácil porque había un montón de gente que quería que me desvíe de la ruta. También estamos determinados a seguir con Jesús siempre. Tuvimos nuestra liberación en él nombre del Señor Jesús. Por lo tanto, tenemos el Espíritu Santo. Y ahora las puertas se abren de una manera impresionante y sé que la liberación es fundamental”, finalizó Lula.
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