jueves, 22 de septiembre de 2011

“Abrir los ojos en el Perú es prácticamente un milagro”

Nicolás Yerovi viene haciendo reír desde hace años a la gente, algo poco inusual en un país lleno de desencantos y desilusiones. Los preferidos de este humorista, han sido casi siempre los políticos. A pesar de las persecuciones, él siempre está presto a su público


-¿Su amor por la escritura desde cuándo nació?

-Desde muy pequeño, no recuerdo exactamente la edad pero era muy chico, incluso aprendí a escribir antes de jugar pelota, cosa que era muy extraño debido a que todos en casa practicaban este deporte.

-¿En el colegio también le gusto escribir?

-Claro que si, recuerdo que en segundo grado de primaria empecé a escribir mi primer periódico, era un nombre muy sobón puesto que yo estudiaba en el colegio La Salle, así que puse el nombre del periódico “Viva La Salle” (risas) ya que me sentía muy feliz y orgulloso de estudiar allí.

-¿Su padre fue el encargado de inculcarle el amor a la escritura?

- Por su puesto, incluso por ese afán que él tenía me obsequio una copiadora muy rustica que podía sacar hasta 30 copias de una misma plantilla, que eran las que yo luego obsequiaba a mis compañeros de salón. Luego me regaló un mimeógrafo mecánico manual que me sirvió hasta en la secundaria.

-Terminado el colegio, ¿qué estudio?

- Llegue a estudiar en la Universidad Católica en la facultad de letras y ciencias humanas y posteriormente tuve un doctorado en lingüística y literatura hispánica. En realidad yo fui un joven sin dubitaciones profesionales porque para lo demás era una bestia (risas), ya que solo servía en este mundo para escribir, imagínese tengo 60 años de vida y solo escribo para hacerle reír a la gente, nada más.

-¿Qué le pareció la vida universitaria?

-Fue un mundo totalmente nuevo para mí, porque en mi colegio solo habían hombres. Cuando ingrese a la universidad tenía que irme hasta la plaza Francia donde quedaba la facultad de letras y allí me quedaba estupefacto viendo a las chicas en minifaldas. Para mí prácticamente fue un paraíso, me acuerdo que en ves de ir a clases estaba sentado al lado de las escaleras a aprender otras cosas (risas).

-¿Y aprendió algo de esas cosas?

-No te diré que no, porque en el Perú muchos mienten (risas)

-¿Usted también publicó en la universidad algunos escritos?

- Por su puesto. En el año 70 cuando tenía 17 años publiqué mi primer libro de poemas que se llamó “Mapas de Agua”. Luego le siguieron seis más, posteriormente mi padre falleció a los 54 años, es así que determiné seguir su obra en la radio.

-¿Tengo entendido que sus familiares eran periodistas?

-Claro que sí, mi padre estaba al mando de Radio Victoria donde en un programa llamado “Yo soy el Público”, que se trasmitió durante 30 años, él se reía de lo que nos pasaba en la vida cotidiana. Ojo, por esos años no existía la televisión y es por eso que la radio era el único medio por el cual las personas se divertían, estamos hablando de los años 40 más o menos.

-Usted debe acordarse muy bien de esas épocas doradas en la radio

- Así es, lo primero que veía cuando me despertaba era a mi padre sentado en una máquina de escribir, por entonces, yo tenía dos años

- Cuando usted llegó a la radio, ¿tuvo problemas con el gobierno militar?

- Ellos se expropiaron de la radio que mi padre había fundado. Eso le entristeció mucho hasta el día de su muerte.

-¿Cómo nació “Monos y Monadas”?

-Eso fue debido a que después de la muerte de mi padre, tenía y estaba obligado a seguir con su labor, es por eso que al mes de su fallecimiento hice muchas gestiones para sacar un medio de comunicación que por esas épocas era un trabajo muy arduo teniendo en cuenta que la dictadura militar te ponía muchas trabas. Es así como después de mucha lucha sale “Monos y Monadas” que terminó siendo una leyenda hasta la actualidad

-¿Pero antiguamente había otro “Monos y Monadas”, o me equivoco?

-Claro que si, mi abuelo Nicolás Yerovi, que se llamó igual que yo, fundó este espacio en la cual tuvo 108 ediciones entre el año 1905 y 1907, ojo, era la revista símbolo en esa época, no solo del Perú sino del continente.

- Entonces usted relanzó la revista ¿cuántas ediciones tiene?

-Después de soportar bombas en mi casa, amenaza de muerte para mí y toda mi familia puedo decir que hasta la fecha hay 451 ediciones más o menos.

-¿Usted prácticamente estaba buscado?

- Lo que pasa es que en la política me querían mucho (risas).

-¿Que tal la relación con los políticos?

-Muy buena, ya que por mucho tiempo me he reído de la gente poderosa del Perú,

-¿De todos los políticos, cuál era el más especial?

- Yo pienso que todos tienen algo muy especial. Espero que nunca se mueran porque si no me quedaré sin chamba, aunque estamos en el Perú, así que eso nunca pasará.

-¿Qué concepto tiene del ex presidente Alan García?

-Primeramente debo señalar que nos gobernaron dos presidentes (por su peso) pero a la larga sigue siendo el mismo personaje que se adora por si mismo.

-¿Qué tal hacer periodismo en la época de Fujimori?

- Era muy divertido porque con el golpe de estado cerró “Monos y Monadas”, para luego perseguirme acusándome de plagiar mi propia novela. Como no tenía plata, opté por empezar de nuevo así que publique “Yerovi, que es el único periodista que miente con franqueza”, que sale todas las quincenas durante 130 ediciones, inclusive durante la época donde Montesinos y Fujimori gobernaban el país, era una represión casi igual a la época militar, pero en ves de lanzarme bombas lacrimógenas, me lanzaban juicios y demandas.

-¿Qué le espera a Nicolás Yerovi en los próximos años?

-La verdad no lo sé, abrir los ojos en el Perú es prácticamente un milagro, y espero que ese milagro esté conmigo (risas)


No hay comentarios:

Publicar un comentario