Testimonio domingo
Durante mucho tiempo el señor Narciso Arias Navarro vivió momentos de desesperación. La economía se encontraba baja y la vida familiar destruida, ya que su hijo estaba muy enfermo. Había vanidad y brujería en la vida del señor que además estaba endeudado con los bancos en más de 12 mil dólares. “Una noche en la que no podía dormir prendí la televisión y miré el programa del Cenáculo del Espíritu Santo, anoté la dirección y tomé la decisión de asistir. Comencé a hacer las cadenas de oración, mi constancia y perseverancia hicieron que los cambios en mi vida acontecieran, Dios curó a mi hijo completamente, hoy es un joven que ocupó el primer puesto en el examen de admisión de la universidad San Martín de Porres, actualmente estudia la facultad de Psicología, Turismo y Ciencias de la Comunicación”, contó.
Para ver todas estas maravillas en su vida, el señor Narciso participó de la Hoguera Santa de Israel. “Yo hice mi sacrificio particular con Dios. Yo trabajo cuatro horas o cinco horas y gano como diez personas. Trabajo poco y gano mucho. Manifesté mi fe y Dios me respondió. Las deudas desaparecieron. Hoy mi familia está totalmente restaurada y hay mucha felicidad dentro de mi hogar”, concluyó.
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