Terapia significa tratamiento para el corazón, es felicidad con base, con estructura. Es necesario buscar a Dios, que es esa base, porque primero hay que estar preparado para amar.
El pasado hace que uno no vea: muchos no encuentran a la persona ideal por traumas que le lastimaron, que le hacen perder la confianza en todo y en todos. El corazón lastimado pierde la confianza. Ante cualquier persona que se acerca, uno está desconfiado. No logró dejar ese trauma en el pasado.
Sin embargo, la fe no está unida al pasado ni al presente, la fe es la certeza de lo que se espera a futuro. Por eso no puedo estar aferrado a mi pasado, porque no me deja salir adelante ni ser feliz.
Cuando uno encuentra a una persona, al amor de su vida, viene el pensamiento, ¿me pasará lo mismo que antes? Porque desconfía, pero Dios dice: “No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva…”, (Isaías 43: 18-19).
Si Dios no hizo nada nuevo en su vida sentimental, pregúntese: ¿He dejado las cosas pasadas atrás? ¿O todavía cargo ese pasado encima?
Hasta que usted no deje el pasado atrás, el Espíritu del Amor no podrá hacer nada en su vida sentimental. Es necesario sanar el corazón y dejar el pasado atrás para que Dios haga cosas nuevas.
Si quiere esta felicidad, que tiene una base firme, lo esperamos en la Terapia del Amor, todos los días jueves a las 4:00 y 8:00 de la noche en la avenida Venezuela 681, Breña.
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